Escrito por Chris Rue, Manager Global de Futsal de Rush Soccer.
No hay mejor manera de aprender y comprender los matices del futsal que sumergirse de cabeza en este deporte. Forma un grupo de 6-7 jugadores, participa en un torneo y enfrenten lo más difícil. Los entrenadores y los jugadores aprenderán mucho mientras compiten contra todos los niveles de competencia. Lo más difícil siempre fue el mejor maestro. Ya sea para un entrenador o jugador, estar en el medio siempre traerá preguntas y continuamente te pondrá en situaciones incómodas. Las experiencias son las verdaderas maestras. Aprender a estar cómodos con la incomodidad es clave para el desarrollo. Para algunos será difícil de tragar; otros lucharán.
El entorno del futsal tiene muchas características similares a la cultura del surf. La cultura del surf puede enseñarnos mucho sobre desarrollo juvenil. Los niños confían en el entorno y aprenden al observar a otros y experimentar. Fallan y repiten hasta que el problema esté resuelto. Pronto, aprenderán. Es una forma muy diferente de aprendizaje. No se les pide que regurgiten respuestas que recuerden para tomar un examen. Esta es una forma de educación que, una vez aprendida a fuerza de prueba y error, se queda. Definimos la habilidad como una tarea que se puede completar a pedido en la situación adecuada, pero rara vez les pedimos a los jugadores que aprendan esa habilidad de manera fluida. Las sesiones se configuran con conos o maniquíes y les pedimos a los jugadores que realicen tareas, pero esto no es desarrollar una habilidad. La genialidad es la capacidad de leer la situación que se presenta y encontrar soluciones, ¿quiénes somos nosotros para decirle a un jugador cómo hacerlo? Su propia experiencia debe guiarlos.
Hemos demostrado ser extremadamente hábiles en este país (Estados Unidos) para hacer que el jugador pueda realizar una maniobra una y otra vez sin problemas, pero ten cuidado con lo que estás creando; robots. Todos los grandes del fútbol apuntan al futsal como un plato principal en sus carreras juveniles debido a la naturaleza pura y cruda de estar 'en el barro'. Tratar con los defensores, anticipar situaciones y aprender el arte del engaño sin duda frustrará a los jugadores en crecimiento mientras aprenden. La falla ocurrirá a menudo. Sin embargo, una educación en este escenario será permanente. Seríamos inteligentes como nación futbolística si incluyéramos una gran cantidad de nuestros jugadores más jóvenes en esta cultura. Solo así competiremos al más alto nivel. Cae sobre nuestros hombros como educadores. Forma un grupo e ingresa a un evento de futsal, estarás feliz de haber tomado esos primeros pasos.
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Foto de Portada: Minnesota Rush.
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